viernes, 20 de julio de 2012

CAPITULO 3.

  Son las doce y media y van en el coche, camino de la playa. Próximo destino: La Pesqueta. Próximo destino: corazón de Héctor. Hector. Vaya, estaba tan entretenida con sus primas en el coche que apenas había pensado en él. Bueno, tal vez un poco, pero solo un poco.
  
Hace algo de calor, están en abril. Cinco personas en el coche, y las maletas en la parte de atrás de este, colocadas perfectamente en formas de tetris.
  Tiene ganas de ver a Héctor. ¡Pero cuánto había esperado este día! Puf...qué nervios. ¿Quién sería esa chica? La verdad es que era mona... rubita, con en pelo largo y rizado, y los ojos de un color oscuro, supone que marrones, aunque no pudo indentificarlo con claridad en aquella foto tan pequeña. Espera que no sea su novia. Podría ser su hermana... no, él no tiene hermanas; pero `podría ser su prima o una amiga. Eso es, seguramente, será solo una amiga. El agudo grito de su prima pequeña le anuncia que pronto lo sabrá.
- ¡Bien! ¡Por fin hemos llegado!
-Vamos sacando las maletas, mamá.
Carmen asiente con la cabeza mientras baja del coche para ayudarlas. No se fía nada de Laura, es un rabo de lagartija; seguro que tira todas las maletas al suelo intentando sacar la suya.
-¿Quieres que te ayude, Laura? - Le pregunta su hermana Julia, al ver que no puede con la maleta que permanece más arriba.
-¡No! Yo puedo sola.
En ese mismo momento, Carmen, ve como lo que había considerado hace unos minutos se convierte más bien en una predicción. Laura ha tirado de su mochila de Bob Esponja, que se encontraba bajo cuatro maletas, de las cuales, tres, han caído al suelo.
-Sí, ya veo como puedes tú sola. Y ahora, ¿me dejas que te ayude?
-Ha sido sin querer... No, esta vez no las tiraré.
-¿Y yo?, ¿me dejas que te ayude yo?
  Esa voz... ¡Héctor!. Laia se gira y efectivamente, ahí está. Intenta disimular su entusiasmo, pero apenas puede.
-Héctor, hola, ¿qué... tal estás?
   ¡Vaya! se le entrecortan las palabras. Mejor callar. Pero ¡no puede ser! Está ahí, por fin está ahí.
-¡Ah, hola, Laia! No te había visto. Estoy bien, gracias, ¿y tú?, ¿qué tal te va todo?
-Muy bien, aquí... como cada año.
  ¡Pero qué estúpida! ¿Como cada año? Él ya lo sabe. Lo mejor será que lo vea luego en La Pesqueta, ahora está muy nerviosa. Además, ha dejado a sus padres y su prima mayor solos sacando todo el equipaje del maletero. 
-Bueno, Héctor, tengo que ayudar a sacar todo ésto, - dice señalando las maletas - así que ya nos vemos luego, ¿no?
  El chico entiende la invitación de Laia a marcharse, y tras despedirse de da la vuelta. Pero no, no puede irse así; aunque tiene novia, tenía muchísimas ganas de ver a Laia... Claro que eso ella no lo sabe. Espera que se lo tome bien, porque le apetece estar con ella. 
  De repente, sin que nadie se lo espere, Héctor se da la vuelta y corre hacia Laia. Esta no se da cuenta de que está ahí, hasta que siente un cálido beso en la mejilla. "Hasta luego", le susurra después al oído. 
  Y así, como si nada hubiera pasado, Héctor se dirige hacia el bar de sus padres con una sonrisa dibujada en la cara.
  
  Laia está como petrificada. Le ha encantado ese beso. Pero justo entonces se acuerda de Arturo. Siente que le está siendo "infiel", aunque pensándolo bien, no están saliendo, ni nada de eso, por lo que puede hacer lo que quiera. ¡El mensaje! Ahora lo recuerda, le dijo que quería hablar con ella. "Voy a responderle", piensa para si misma.
  Se acerca al coche y saca del bolsillo lateral de su mochila azul el movil. Empieza a escribir la respuesta que, sin que ella lo sepa, Arturo lleva casi dos horas esperando. "¿Importante? Me tienes intrigada. Ahora no puedo hablar, así que te llamo esta noche. YO también te quiero, besitos." Vuelve a leer el mensaje que le envió él por la mañana. "Te quiero. Besos". Besos, besos. Cómo le gustaría un beso de Arturo. No sería el primero que recibiera, pero sí el que más ilusión le haría ahora mismo... ¿o no? ¿y uno de Héctor? ¿Cómo sería? Bah, qué mas da eso. Seguramente ninguno de los dos la besaría, por mucho que ella quisiera. Siempre tiene muy mala suerte en el amor. Pero eso es tan solo lo que ella cree, pues pronto comprobará que algunas veces todo lo que se ha deseado alguna vez, se te concede de golpe.
 
 


1 comentario:

  1. hector tiene novia :/ y arturo tan lindo :)
    espero q hector no lastime a laia

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